Al principio se creía que el Pentaceratops tenía 5 cuernos y de ahí proviene su nombre, pero en realidad, los cuernos adicionales, son dos pómulos puntiagudos que encontramos en casi todos lo de su especie, pero en el caso del Pentaceratops, son más prolongados.
Los primeros restos del Pentaceratops, fueron encontrados en New Mexico, como el Parasaurolophus y posiblemente el Daspletosaurus. Si observamos un cráneo del Pentaceratops, nos daríamos cuenta de que todas sus láminas óseas son huecas, esto es para que no les pesara tanto y pudieran moverlas más fácilmente. Su lámina parietal estaba rodeada de nódulos óseos puntiagudos, quizás de adorno, además de ser una defensa natural para sus depredadores, a los que asustaba moviendo su gran cabeza de arriba a abajo, con sus patas firmes en el suelo, lo cual asustaba a alguno de sus atacantes.
El Pentaceratops era herbívoro, tenía un gran pico sin dientes que utilizaba para recolectar las hojas de los helechos y otros arbustos. Se ayudaba de su lengua para empujar el alimento a la parte posterior de su boca, para que los dientes lo trituraran y así le facilitaba la digestión.
El Pentaceratops vivió en el período Cretácico, hace unos 73 millones de años
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